Guardavidas de la municipalidad de Viedma que se desempeñan en La Lobería realizaron hoy una delimitación a pocos metros de los acantilados de ese balneario.
Si bien siempre se aconseja no colocarse cerca de esas paredes de piedra por los posibles desprendimientos, ahora se advierte la posibilidad de un derrumbe de mayores proporciones.
Es por ello que los guardavidas impidieron el acceso al lugar colocando cintas amarillas. El sitio exacto es a unos pocos metros de la escalera por la que se desciende a la playa.
“Seguimos realizando prevención, esta vez improvisamos un perímetro en una zona donde diariamente se está derrumbando”, escribió el guardavidas Cristian Idiarte en las redes sociales.
Fuente: Noticias Rio Negro
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